Desde ya mismo voy a reconocerte una cosa: Mi tercera novela, «Rebelión«, es la que peor se ha vendido, hasta la fecha. Incluso la última, «Revelación«, lleva una trayectoria mejor en la tienda de Amazon.
Por supuesto, quizá haya, al menos, dos motivos. El primero, el lanzamiento de la encuadernación en tapa dura desde KDP / Amazon solo unos pocos meses después, que me permitió publicar mi «Trilogía Ciborg» en ese formato, que le quitó protagonismo y visibilidad a esa novela independiente.
Pero, el segundo motivo (quizá el que más me duele) es que mi público no supo entender la portada de este libro. La imagen de la portada es una fotografía real de una puesta de sol en Marte, descargada desde la página de la NASA. Lo que sucede es que, al contrario que en la Tierra, las puestas de Sol allí son azuladas (a cambio, el amanecer es rojizo allí).
Así que utilicé una foto real para una portada de una novela cuya trama sucedía en gran parte en el Planeta Rojo… Pero muy pocos supieron captar ese detalle, y mucho menos relacionar la foto con Marte. Siento no haberme dado cuenta del detalle. Tuvo que ser un compañero escritor (G. G. Melies, también escritor de ciencia-ficción, tienes una entrevista que le hice en este enlace) quien me abriese los ojos. Él mismo me sugirió que siguiese la visión (equivocada) de la «masa», y produjese una versión de la portada en tonos rojizos.
Pues bien, pendiente del resultado de mi encuesta de otoño para las portadas de mis cuatro novelas, he aquí el resultado preliminar de este ejercicio. En el fondo, sería adaptarme a lo que mis lectores esperan, pero no deja de ser una forma de populismo… ¿Qué te parece?
