Como siempre, la vida está ahí para aprender lecciones. Si me sigues desde hace tiempo, sabrás que no soy muy amigo de las series de libros. Parece que la gente no es capaz de contar una historia en un único libro, y muchos escritores intentan, a veces de manera artificial, estirar una trama para llenar libros y libros de ochocientas páginas, uno tras otro.
De hecho, algunos temas, como la Fantasía y la Ciencia Ficción, parecen ser más propensos a la escritura de series, algo que muchos autores utilizan a su favor, planteando estrategias comerciales muy concretas: Habitualmente, el primer libro de una serie se puede comprar a un precio reducido, como un «cebo» para atraer nuevos lectores. A partir de ahí, el resto de libros de la serie llevan un precio más «correcto», en línea con los de su categoría en una tienda determinada.
Pues bien, hace poco me di cuenta de que yo mismo publiqué una continuación de mi primera novela. Sigo pensando que son dos historias separadas, dos argumentos cerrados que se pueden leer de manera independiente. Hay diez años de distancia entre las dos tramas, que, eso sí, recuperan algún personaje. Lo que me ha preocupado (aunque poco…) es que ya tengo una idea para una tercera parte. Medio en broma, medio en serio, estoy consultando en las redes sociales cuál podría ser el título de mi tercer libro de ficción, después de «Resurrección» y «Revolución«. Desde ya, acepto sugerencias, sólo deja tu comentario aquí abajo.
Pero eso significará que soy el (malvado) autor de una serie de libros. ¿No podía haber publicado todo en un único volumen? Vaya, creo que no. Si hubiese tenido que esperar a publicar los tres juntos (ojo, que todavía no me he puesto en serio con el tercero…), seguramente nunca hubiesen visto la luz.
Así que con este artículo me desdigo. No puedo estar en contra de las series. Ahora entiendo a muchos de esos autores, aunque sigo algo «mosca» con series de libros que no parecen tener un final (¿lo tendrá la mía?), y con estrategias de «cebo» para atraer a nuevos lectores. Lo que me lleva al siguiente tema… ¿Tengo que replantearme mi estrategia de promoción? Sígueme en las redes sociales, o añade un marcador a esta página – muy pronto lo sabremos.